Día del rebote, y de la decepción...

Tras varios días con el blog criando telarañas, vuelvo sobre el mismo. Decíamos ayer... que dijo Fray Luis.

.

Hoy me siento como el personaje del profesor, del científico que interpreta José (siempre para todos, Pepe, igual que Soria es Paco y no Francisco) Isbert en "Historias de la Radio". Quiere conseguir una patente de un invento realizado en colaboración con un colega suyo, no le importa demasiado el dinero, quizás la fama, y sobre todo el sentirse satisfecho por lo realizado, y quiere evitar que nadie se adelante con esa patente, que nadie, como "los americanos" le "chafe" la idea.

.

Por ello, tras escuchar por la radio que uno de sus anunciantes ofrece una cuantiosa suma (para la época, 3000 pesetas) por ir rápidamente a la emisora vestido de esquimal, con perro y trineo incluído, el citado colega convence al bueno del coinventor para que vaya vestido de esa guisa por Madrid, se rían de él, se mate por coger un taxi, se monte en uno, se pelee por las escaleras de los estudios de radio con otro competidor que quiere el premio por dinero, y finalmente se entere que el premio se lo ha llevado otro.

.

Así, ha sido, desde el lunes llevo detrás de un asunto laboral, "matándome" a trabajar, ya que puede reportar buenos beneficios económicos, y posiblemente una buena consideración, todo tiene que ser muy deprisa, porque como Isbert, hay que llegar al jueves (hoy) con el trabajo hecho, he tenido que dejar de lado otros trabajos (para mí tan importantes como ese), llamada telefónica incómoda con alguno de "cuerpo" vecino (se supone cual), (incómoda no porque trabaje allí, si no por ser el tío un "bordesico", que dicen en Cartagena), comer a toda leche, volver al trabajo tempranísimo, rellenar datos de cuestiones que en principio no corresponden tradicionalmente a nuestro trabajo, para... que hoy por medio de la red de redes, y de mi Intranet, me entere, no sé gracias a qué o quién, de que otro u otra de fuera de mi despacho se lleva el trabajo, el dinero, que es importante, y la gloria, por tanto "los americanos" se llevarán la patente.

Yo me llevo la decepción y el cabreo.

.

En fin, consuelo me queda, esta noche fiesta con Rentins, Gato-Isildur, y los miembros y miembras del Ilustre Colegio de Procuradores, ellos serán el Bobby Deglané particular que da de su bolsillo no las tres mil pesetas, algo menos pero al menos la amistad y el buen rato a pasar (espero) ... Es el consuelo que queda, que en este mundo con tantos "lobos" y "perros", también existe la amistad, la simpatía y los buenos momentos.