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Triste, muy triste. Así es el Real Murcia de esta temporada 2008-2009, la del fin del año del Centenario, "Centenarius Horribilis" o "Centenariazo", un largo "Centenariazo" (expresión que se usa desde aquella final del Mundial 1950 en Brasil, en que Uruguay dió la sorpresa derrotando a los anfitriones en el megaestadio de Maracaná).
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Un Centenario murcianista, que no sólo no ha supuesto mucho, desde el punto de vista social (se llegó a plantear por parte del en un principio Consejero para el Centenario Antonio González Barnés la celebración de un evento cada día, González Barnés dimitió poco después):
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Poco salvo un miniconcierto de un cantante de cierto renombre (Marc Anthony) aunque otros hubieran preferido algo más grandioso el himno (ahorrando perrillas para no contratar a Carlos Tarque de M-Clan, aunque Second ha hecho un buen trabajo), el logotipo del Centenario (¿Porqué tiene que sustituir a un escudo de más de 80 años, desde que el Murcia es "Real"?) y la camiseta (es la del Centenario y nada más, punto). Y bueno tres libros, dos extraoficiales hechos a título particular, "a rebufo" de la efeméride y uno "oficial" escrito por Juan Ignacio De Ibarra. Además un partido de pretemporada contra un equipo el Ajax de Amsterdam, que fue "gloria" del fútbol europeo, pero ya no lo es tanto, aunque es un gustazo ver esos equipos en Murcia.
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Pero sobre todo, el Centenario está siendo un desastre en lo deportivo. Habiendo alcanzado la cifra más alta de socios-abonados de la historia del club el año pasado (24000 socios y porque hubo que "cerrar el cupo" y este año cerca de 17.000), haciendo en teoría unos fichajes que hacían concebir esperanzas para no pasar apuros en 1ª División, donde sobre el papel se merece una capital de provincia como Murcia (7ª de España, además de por historia), el equipo tras una primera vuelta esperanzadora, llegando a colocarse a poco de esa primera fase de la liga en 9ª posición, cae en picado, y tras 10 jornadas consecutivas sin conseguir la victoria, es destituido Lucas Alcaraz (entrenador muy criticado en aquel entonces por la afición), le sustituye Javier Clemente, que ha rechazado una oferta para entrenar a la selección de Irán.
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En medio de una gran expectación mediática, y pese a no mejorar deportivamente los resultados de Alcaraz (se gana eso sí al Español y al Valencia y se da una buena imagen contra el Barcelona en Nueva Condomina), se confía en Clemente para continuar en 2ª, el año siguiente, a pesar de la absoluta inexperiencia del entrenador de Baracaldo en la categoría de plata del fútbol español, pero según el propio "míster" murcianista: Se trata de fútbol, y da lo mismo jugar en 1ª que en 2ª, es igual, viene a decir. Muchos aficionados y también la prensa creen en el proyecto para volver a la élite del fútbol profesional español.
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Pero en verano, e incluso avanzada la temporada, el equipo que había sido la base del último ascenso con Alcaraz se desmantela: En la portería, Notario se marcha al Celta (portero clave en el último ascenso), Carini (internacional uruguayo) no entra en los planes del equipo, y se confía como portero suplente de Elía (que está cumpliendo) en Alberto, proviniente del filial pimentonero. En la defensa, aparte de fichar jugadores de 3ª división, y menospreciar al capitán durante las últimas temporadas Juanma, en el primer equipo desde 3ª (y operado del corazón para jugar con el Real Murcia), al que se aparta del equipo, no se cuenta con Pignol, el mejor lateral derecho de la plantilla que marcha al Zaragoza.
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En el centro del campo y la delantera: Se va Richi, un jugador que puede que tuviera carencias, pero también grandes virtudes, era un "jugador de club", y ahí está metiendo goles con el Tenerife; no se cuenta con Abel (uno de los jugadores clave en el ascenso hace dos años) que se marcha al Steaua de Bucarest, ni con Jofre (otro jugador importante y rápido). Tal vez esos jugadores no valían para 1ª, pero en 2ª eran muy válidos, y lo demostraron. Así lo demostró Goitom en el Ciudad de Murcia hace dos años, lo que había motivado su fichaje por el Real Murcia, pero se le cede este año al Valladolid.
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El equipo no juega, el equipo no ilusiona, el equipo entristece. Hoy, no jugando un mal partido, pero merced a la bisoñez de alguno de sus jugadores y a las carencias del conjunto grana, después de ir ganando 0-1 en Vitoria, frente al Deportivo Alavés, ha terminado perdiendo 4-1.
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Seguro que no se piensa en tomar medidas del tipo de despedir a alguien, pero ya puestos como digo deberían exigirse responsabilidades a más de uno, especialmente a los que han elaborado este equipo...
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Esperemos la pronta recuperación, en cualquier caso, del Real Murcia, y se pase este "Centenariazo".
3 comentarios:
Yo aportaría algún cometario ingenioso amigo Tigretón, pero es que, como decía Lloyd Bridges en "Hot Shot", "no entiendo un pijo de lo que me dices".
No me gusta el fútbol. Sorry.
Je, je, pues como le dijeron a Jack Lemmon en "Con Faldas y a lo Loco": "Bueno, ¡¡nadie es perfecto!!" ;)
Bueno, en serio, conozco a muuucha gente a la que no le gusta el fútbol y son personas cultísimas, y respetabilísimas. Un amigo de mi padre, arquitecto, se preguntaba precisamente hace años como a gente como nosotros nos gustaba el fútbol, aunque cada vez está más expandido, entre sexo, raza y condición. Y es que esto es como una droga... A mí sinceramente no me gustaba nada hasta los 11 o 12 años. Luego me fuí "enganchando", y lo veo (no todos los partidos, algunos son una castaña) y lo juego (no muy bien, me defiendo) hasta dos veces a la semana. Y lo mío por el Murcia es mezcla pasión, locura y a veces, cuando van las cosas mal, pienso que hasta tontería, aunque cuando van bien lo pasas genial.
Hombre, que a alguien le guste el futbol no implica desde luego, que sea un inculto. Lo que si sospecho es que en los espectáculos de masas (y en esos incluyo el cine) es muy fácil que algunos se sumen con un encefalograma plano como carte de presetnación y sólo grite y llore cuando los demas gritan o lloran. No todos son así, pero que existen, (insisto, hasta en el cine), lo tengo muy claro. Son los conocidos como "borregos". Y de igual forma que cuando voy a ver un super-estreno al cine y veo la sala llena, no puedo evitar preguntarme cuando veo a miles de seguiodres en un campo de futbol y todas las televisiones de un país enchufadas, deducir que por pura lógica matemática, deben de haber muchos borregos. Pero insisto y que nadie me malinterprete. Todos tenemos algo de borregos alguna vez en nuestra vida y todo lo que implica una masa de gente acoge el borreguismo.
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