jueves, 21 de octubre de 2010

El día en que terminé una carrera de 10 Km ("Ponle Freno 2010")

Por fin. Por fin, pude "sacarme la espina" de lo ocurrido el pasado mes de Junio en Blanca, en la carrera de "Fiestas de San Pedro" (Barrio del Alto Palomo), donde víctima del calor, de la falta de preparación y de mi bisoñez, "pagué la novatada" y tuve que retirarme.
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El pasado domingo era el día propicio. El recorrido era llano, totalmente, además de haber practicado en él el domingo anterior (salvo un tramo que sustituí por otro paso "extra" por la Gran Vía en dos ocasiones más y por Avenida de la Constitución), lo que me hizo confiar en que terminaría casi sin duda.
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Salida y primeros kilómetros:
No encontré en la salida al amigo Rentero, aunque sí al gran Javi (Prández), al que saludé previamente (aún no he localizado su posición final en la clasificación de la carrera). También hice lo mismo con varios compañeros de mi promoción de Maristas...
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Llevaba mi gorra, porque no olvido, una vez más lo ocurrido en Junio, aunque no sabía si va brillar mucho el sol.
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Salí a un ritmo de 5 minutos y 40 segundos el kilómetro, que mantuve durante los primeros 1000 o 1500 metros. Al cruzar el puente de Vistabella en dirección a La Glorieta de España aflojé el ritmo, y fuí dejando que me pasaran algunos corredores más de los que ya lo habían hecho. Me puse entre 6 y 6,30 minutos el kilómetro.
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Miraba el pulsómetro cada cierto tiempo. Aprendí a manejarlo en entrenos, y ahí voy. La frecuencia cardíaca marcaba más de 190... En Blanca recuerdo que me retiré con 192 y 191 de frecuencia cardíaca. Ahora ya entendía... ¡Mi pulsómetro iba "loco"! Pese a que las instrucciones y el letrero en el exterior del aparato dicen que la señal que el cacharro emite es codificada, sin embargo el símbolo con un corazón en la pantalla de mi unidad de pulsera (que fino me ha quedado) indicaba que no era así, o sea, que estaban interfiriendo señales de otros corredores, vamos que a mi ritmo cardíaco se añadían los de no sé cuántos corredores más cercanos.
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A partir de ahí, preferí mirar en el cacharrito, sólo el ritmo y la distancia recorrida únicamente, y en cuanto a lo demás llevarme por mis sensaciones, seguir la música que empezó a sonar con "The Walk of Life" (Dire Straits) y la "cañera" "Raised on Rock" (la canción-despedida de los Scorpions, que dejo a continuación:...)






¿A que tiene ritmo y anima bastante?
Si "Living On a Prayer" fue (parte) de la banda sonora de mi "pajarón" en Blanca, aquí es distinto, todo empieza con esas canciones, pero...
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Parte intermedia:
Había preparado el día antes una lista de reproducción musical, calculando ritmos, momentos... Las canciones sonaban hace tiempo a través de los auriculares de mi Sansa Clip (ahora con unos auriculares especiales con una pequeña sujección para correr, para que no pasara lo que ocurrió en la Villa del Valle de Ricote, -los compré a los pocos días de aquéllo-). Por cierto, descarté la canción de Bon Jovi antes citada (hubo otras), con la que empecé allí, no vaya a ser gaferío o algo de eso. Aquí además el no poner música hasta llevado más de un km., quizás también influyó para no salir como un descosido y reventarme vivo...
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Al bajar la Gran Vía Salzillo veo en dirección opuesta a mí al corredor que ganaría la prueba, corriendo por el carril delimitado por conos, es decir del sentido inverso dirigiéndose a meta. Quedo alucinado. ¡Va esprintando! Un coche le sigue y el crono encima del vehículo indica 25 minutos... Termina en 32 minutos.
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Primeros saludos y aplausos de conocidos. Ánimos también de desconocidos. Alfonso X..., Jaime I..., Gutiérrez Mellado... Veo botellas de bebidas isotónicas en el suelo (me acuerdo otra vez de Blanca y lo que hice con las botellas arrojadas por los corredores que me precedían. Ahora voy muy bien, encima no hace calor). No veo avituallamiento alguno.
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Me cruzo con varios corredores conocidos que van delante mío y que me animan. Sigo hacia la Avenida de La Fama (quizá lo más desesperante, ya que por un momento pensé: "buf, lo que me queda ahora para volver al otro lado. Fue un pensamiento pasajero, vuelta a empezar). Doy la vuelta y antes de entrar en Avenida Gutiérrez Mellado de regreso, me encuentro que viene de frente en dirección a hacia donde yo vengo (como la canción de Chenoa... :) ) mi tocayo Rentero que me pregunta cómo voy, a lo que respondo haciendo referencia a una preposición, al oficio de más antiguo del mundo y a la maternidad (vamos, que "de puta madre"). Me ha dado mucha alegría verlo, porque no sabía nada de él. Faltan apenas 3 km. Está hecho, pienso.
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Parte final:
Voy adelantando puestos, gente que se empieza a quedar tirada, gente que lleva otro ritmo... Hay gente que se les ve veteranos, pero que prefieren ayudar a novatos/as a los que acompañan...
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La Gran Vía otra vez. Pienso en apretar el ritmo, pero ¿qué voy a ganar?. Da igual, lo importante es llegar, así que cuando llego a la cuesta de la plaza Martínez Tornel aguanto un poco . Antes de cruzar el puente del Hospital Reina Sofía, animo a algunos corredores y corredoras que no van muy bien...
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Llegada a meta:
Enfilo la recta final... Por fin... Esto tenía que haber sido en Junio en Blanca, pero ahora... Ahora veo el tiempo que estoy llevando encima de la meta... ¡1 hora! Bueno, no está mal para ser la primera. Me quito la gorra para la foto, me repeino en plan ciclista en el Tour, doy un beso entre al aire y al Cielo, me persino, entro en compañía de dos corredores (no he querido tampoco disputar con ellos la llegada, me da también igual). 1hora y 3 minutos. Puesto 983 de 1200 corredores que tomaron la salida (200 abandonos, echad un cálculo) He aquí el vídeo de mi llegada(con espontáneo incluído tras de mí -no hay forma de insertar el vídeo-)
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Rentero llega unos minutos después que yo... Le hago una foto...


Y luego me hago una foto con compañeros de carrera y amigos de Maristas...
La carrera de Blanca este año no se me resiste...

miércoles, 13 de octubre de 2010

Centurión (2010) de Neil Marshall


"¿Te gustan las películas de gladiadores?"- decía el piloto en "Aterriza como puedas". Hombre, no exactamente. A mí me gustan algunas películas de romanos, por el hecho de que admiro el Imperio Romano y su legado: el Derecho privado, la cultura, su lengua, el arte, ingeniería, comunicaciones...Incluso era avanzado su ejército, un ejército profesional como los modernos.
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Las legiones eran verdaderas máquinas de guerra. El ejército romano fue el primero verdaderamente que impuso la uniformidad entre los que lo formaban. Los "gladius" (espadas cortas), "pilums"(lanzas arrojadizas), la "lorica segmentata" (armadura formada por tiras de metal), en la infantería, y el apoyo de la maquinaria pesada, y de la caballería y los arqueros, dieron como resultado que Roma se apoderase de buena parte del mundo por ellos conocido.
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El cine, prácticamente desde siempre, se ha ocupado del Imperio Romano, en sus diversos aspectos, y en sus diversas etapas, desde su esplendor a su decadencia...
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El cine de "romanos", sufre un período de auge (años 50 y 60) , realizándose tanto grandes superproducciones como películas serie B o Z (como decía Sabina: "Siempre daban una de romanos"). En el mismo género, hay quienes incluyen películas bíblicas, de espartanos, troyanos, o de cualquier cultura de la antigüedad sea o no clásica.
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Luego, al igual que pasó con el "Western", vino una época, no sé si por hartazgo, en que no se hacían este tipo de películas. Para el Western llegaron "Bailando con Lobos" y "Sin Perdón" , fundamentalmente (aunque realmente nunca se dejó hubo otras antes). Para el "peplum" o cine "de romanos" vino "Gladiator", la historia del general que se convirtió en esclavo, y del esclavo que se convirtió en gladiador... Una buena película, en líneas generales (aunque no se ciña a los acontecimientos históricos). Se decía que iba a ser el principio de la vuelta del género...
Llegaron: "El Rey Arturo", con una Ginebra picta con carcaj y flechicas (nuestra "admirada" Keyra, amiga Athena) y algunas escenas humorísticas estupendas (aunque propiamente no estén pensadas como tales), "La Última Legión" basada en una novela de Valerio Massimo Manfredi, algo más correcta.
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"Centurión" ha sido una decepción (rima y todo). Hasta la batalla inicial, que algunos destacaban como épica me ha parecido mala. El argumento no me ha parecido "nada del otro jueves". La historia de un centurión que habría que considerar un gafe (no desvelaré porqué, vedla), llamado Quinto Dias (pronunciado "Días", como si fuera hispano pero de los de Hispanoamérica no de Hispania) huyendo con sus colegas de la IX Legión que está al mando del general Tito Virilo (algo así como dicen por ahí, equivalente a "Tío Machote", que no "Pijus Magnificus". No obstante, en combate dicen sus legionarios que es "un verdadero dios") de los malos, malísimos pictos, pintados. Le acompañan por tanto los miembros de la "Novena" como le llaman en el film (queda un poco raro) . Por momentos, con los planos cenitales en las huídas, parece que se han basado en "La Compañía del Anillo" (pero sólo eso).
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Decapitaciones, mutilaciones, gore por doquier... y a correr. Poca acción salvo la batalla del principio, combates y poco más. Se acabó el presupuesto, parece. Al frente de los malotes pictos del Norte de Bretaña está una sañuda Olga Kurylenko, que hasta pintarrajeada está guapa la tía... pero sólo destaca eso. Encima no habla (vaya papelones, en "Quantum of Solace" acento ruso siendo boliviano-rusa, y aquí sin decir nada). Pero bueno, mi admiración hacia Doña Olga, a la que no se le corre el rimel en toda la película... Sale también otra guapa, Imogen Pots, la de "28 semanas después".
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Curiosas torturas a las que someten a los prisioneros romanos. Por cierto, se ve que en esa época iban bastante mal de próstata, ya que en la película hay tres personajes que sienten ganillas de hacer necesidades fisiológicas "menores" (y se ve que "hacen"). Llama la atención un legionario de raza negra (tal vez siendo miembro de las tropas auxiliares podría ser, pero no de la legión) , que camina más rápido que los demás porque corre ¡maratones! :-D
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En fin, quizás la intención, la idea era buena: La ambientación, el paisaje (bella fotografía, oscura, fría, gris; como Escocia), el trasfondo histórico; sin embargo el resultado, en mi opinión, malo.

lunes, 11 de octubre de 2010

Y mi tocayo Rentero cantó los 40 (el otro día, es lo que hay)




















Obsérvese la cara de felicidad y satisfacción del chaval, a consecuencia de haber cumplido con el deber de apagar las llamas de las velas...
Y como decía su camiseta "La vida empieza a los cuarenta"
Bueno, y ya lo dice él en su blog... (aludiendo a lo que dice Lola Gracia)
Si todos los santos tienen octava los cumpleaños igual tienen algo más. Disculpen y que me disculpe por la falta de puntualidad en recordar lo que fue una noche fantástica, motivos laborales me lo han impedido.
Una suerte contarme entre sus amistades