Quantum of... ¿mande?

...Deception, (hay quien la califica como "...of Disaster"
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El pasado viernes como muchos en el mundo mundial acudí a ver la película 22 de la saga Bond: Quantum of Solace (Consuelo mínimo, o El Menor de los Consuelos, en traducción de Antonio Rentero), se explica al verla el porqué de la no traducción al español del título (algo que no diré para no destripar demasiado).

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Aviso a navegantes, grumetes y polizones, el contenido de esta entrada puede contener spoilers, o sea un destripe de algo, lo advierto...

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Recuerdo cuando Ramón me comentó no sé si en éste o en qué blog que "humanizar" a un personaje podría ser contraproducente, no sé si con esta película será el caso, o si se trata de una película de transición y es que el personaje no está aún totalmente desarrollado tal y como se le conocía.

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Cine Rex, 20.30 horas. Tras varios trailers (alguno de interés como el de "Operación Walkiria") comienza la película con una espectacular secuencia precréditos de persecución automovilística (de lo mejor del film o la mejor).

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Para empezar no hay "Gun Barrel" al principio (ni siquiera como en "Casino Royale"), el sello característico de una película Bond... ¿Es imaginable una película de Star Wars si letras deslizándose a través de la pantalla, contando una introducción al episodio, precedidas de "Hace mucho tiempo...?
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Títulos de crédito iniciales que como indicó el amigo Antonio son los peores de la saga, aunque quizás los de "Muere otro Día" no le anden muy a la zaga, buena canción central.

He aquí los créditos iniciales que alguien "colgó":

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Seguramente Bond todavía no es definitivamente Bond, que esta película se desarrolla sólo unos momentos después de Casino Royale, y la persecución del principio se origina porque Bond lleva "algo" importante en su coche que sale al final de su primera misión como doble cero (no desvelo el qué por si acaso alguno no ha visto la peli). Pero... ¿estamos ante una verdadera película Bond? ¿O es que "éste no es James Bond que nos lo han cambiado"?

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Hombre, cambiadillo está... ya hablaré de eso.

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Después de la interesante escena precréditos citada de la persecución automovilística todo es una sucesión de vertiginosas escenas de acción (prácticamente no se para en toda la película), sobre todo incidiendo en planos cortos, que algunas veces hace que no se distingua claramente quién es quién y siento decir que alguna muy alabada como la de la ópera, puede resultar muy artística pero no me gustó nada.

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En cuanto a la chica (no entiendo porqué demonios tiene acento ruso si vive desde que nació en Bolivia ¿se fue con unos tíos suyos a las frías estepas tras lo acontecido con su familia y allí cogió ese "deje"?), bueno, la chica guapísima, y no es una simple "mujer objeto", tiene su parte activa, pero quizás esté desaprovechado su papel, todo consiste en una serie de encuentros y desencuentros con Bond, en vehículos y poco más, les une el deseo de venganza (en plan Bronco Bill, en plan Charles Bronson, pero si es... ¡¡James Bond!!!). Su relación con Bond se limita a un casto beso al final entre los protagonistas (?¿?¿?) por mutua pena. En cambio Bond se "lía" como en otros tiempos, probablemente los venideros, a las primeras de cambio con la agente Fields (que con una sugerente y escasa gabardina ha venido a recibirle al aeropuerto de La Paz), una chica Bond secundaria, cuyo nombre completo no quiere la señorita desvelar al doble cero, pero es según los créditos finales "Strawberry Fields" (Forever) como la canción de los Beatles (sic).

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Buenos homenajes a anteriores películas de la saga (concretamente a dos, uno fácilmente reconocible)

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El malo Dominique Green es un malo a la "nueva usanza" representado por la persona de "doble cara", y especialmente con maldad orientada hacia el medioambiente y los recursos hidrológicos, pero no llega no ya a Auric Goldfinger (malo de la "vieja guardia"), sino a su predecesor Le Chiffré ni a la suela del zapato (por cierto que el actor francés que interpreta al personaje llegó a declarar que se inspiró en su "presi" Sarkozy para el papel). Y hablando de talla de personaje, no es de recibo enfrentar en lucha cuerpo a cuerpo a un tío de la estatura de Craig con un señor malo que es bastante, bastante bajiiiito, podría haberse evitado. El otro villano, el general es una mera comparsa.

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Como secundarios destacar a la siempre correctísima Judy Dench ("M") ahora con más papel que nunca (no hay Monney Penny ni "Q" que valgan, no sé si de momento o será definitivo, si es así otro cambio diferenciador, quizás hayamos salido ganando con el cambio porque se trata de una grandísima actriz pero la película se basa en encuentros y desencuentros con "M" durante buena parte del metraje, M en persona en Siena, M en Londres, M en La Paz, M en Rusia... aparte de las conferencias telefónicas). Buen trabajo también de Giancarlo Giannini

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Y... 007 que es menos 007, me explico: James Bond es un tipo simpático, galante, mujeriego, y sobre todo con sentido del humor irónico rayando en lo cínico. Aquí no, aquí es un tío serio, apesadumbrado, con los fantasmas del pasado reciente (medio "depre" se podría decir y con cierto "onanismo mental" por lo ocurrido con Vesper), carente prácticamente de sentido del humor (salvo algún "amago" como la mención a que un enemigo está "en vía muerta", o el cambio repentino a un nuevo "hotelito" en La Paz). Es vengativo hasta el final y se la tiene jugada a sus enemigos, se comporta como un asesino frío y rudo... Supongo que habrá que esperar la evolución del personaje.

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Es de tener en cuenta que la nueva etapa de Bond dicen que tiene claras influencias de la trilogía Bourne (además esta película tiene unidades de rodaje que participaron en el "Ultimátum de Bourne"), lo cual se aprecia en algunas escenas de acción.

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Por cierto, curioso que "Universal Exports" siga funcionando aún como "tapadera" del MI6 después de tanto tiempo (aunque parece que los malffados, brifffones, sospechan algo cuando les das una tarjeta de la citada Compañía)

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Para colmo James Bond viaja en esta ocasión más que el Imserso, y tan pronto estamos en Siena, pasamos a Puerto Príncipe, nos vamos a Londres, volvemos a Italia (con Mathis y cía.), rápidamente a La Paz, de allí al desierto boliviano (menuda han montado los chilenos que les dejaron grabar en sus tierras) y Rusia, demasiado cambio, cierto es que Bond viaja en sus películas pero prácticamente toda los films desarrollan su trama en el mismo escenario y alguno más. ¿Será cosa de la globalización?

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Cuando terminó la película justo antes de los créditos finales me alegró ver el "Gun Barrel" mientras comienza a oirse por primera vez en la película el "James Bond Theme" de John Barry (o Monty Norman si es que es así) porque si no hubiera pensado que no he estado viendo una película de Bond, James Bond (nada que objetar a la buena banda sonora de Arnold, salvo el no uso del tema citado durante ninguna escena, eso sí está "aludido" brevemente en algunos momentos). Todo esto no ocurría en "Casino Royale", todo era muy diferente.

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Así que... a esperar al Bond 23, tras lo que parece una película de transición dentro de la serie. He aquí el famoso "Gunbarrel" de "QOS" (más tradicional que el de Casino Royale por así decirlo)