lunes, 18 de enero de 2010

La que está encimica del Puente...


La Historia está llena de casos de gente que rompe o destruye, total o parcialmente, monumentos, obras de arte, el legado de los antepasados, sólo por placer o por el hecho de querer hacerse famoso.
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En psicología se habla de "Complejo de Eróstrato", como un trastorno por el que una persona, que siente inferioridad, y quiere sobresalir, llamar la atención a toda costa, aunque sea haciendo el mal (por alusión al griego Eróstrato, que incendió el Templo de Artemisa en Éfeso, una de las 7 Maravillas del Mundo antiguo, sólo para pasar a la posteridad). Los incendios forestales de todos los veranos son, en muchos casos, un ejemplo.
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A veces ni siquiera hay motivación en algunos actos vandálicos (las pobres y casi desaparecidas cabinas sufrían mucho. ¿Era culpa de Telefónica y sus tarifas? Aún que así fuera, nunca se justifica su destrozo). ¿Qué motivación tienen ciertos graffitis en edificios importantes o no importantes? Existen modernos talibanes que destruyen por destruir.
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Este fin de semana, la estatua de la Virgen de los Peligros, situada dentro de su hornacina, desde hace muchos años, ha sufrido el ataque de un vándalo.
El oligofrénico que ha hecho esto no es que no tenga buenos sentimientos hacia la Virgen de los Peligros, es que no los tiene hacia Murcia. La capilla de la Virgen de los Peligros, y el Puente Viejo (al final o al principio del cual se sitúa la misma, según seas del Barrio del Carmen o no) son una de las imágenes más características de Murcia, como pueda ser La Catedral con su torre y su fachada barroca de Jaime Bort, El Palacio Episcopal, el jardín del Malecón, o nuestra huerta...
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Se trata de Historia de nuestra Ciudad, como recordaba hace pocos días un conocido diario (no sé si el energúmeno/s lo leería/n -mucho suponer-). Muchos todavía se persignan al pasar por ese Puente Viejo, delante de la imagen (ahora retirada), y existe hasta una jota que la menciona (cuya letra en parte cito en el título de esta entrada).
Para mí durante un par de años, era una sensación melancólica salir de madrugada, en dirección a la Estación de Ferrocarril del Carmen, hacia tierras leonesas, y tropezarte con la Virgen de los Peligros. Era como decir: "- Hasta pronto, Murcia".
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Suma y sigue, hace unos años pintadica en la fachada de la Catedral... ahora esto. ¿Cultura y educación en muchos?: Ninguna ¿Odio hacia lo cristiano?: Todo. ¿Respeto a las creencias o a la Historia?: Nulo.

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